Seremi dijo que se cayó mito del supuesto rechazo de la vacuna por parte de los trabajadores de la salud.
Un enorme interés entre los funcionarios de la Salud Privada generó la vacunación contra el Covid 19 que tuvo lugar esta mañana en el Gimnasio Guibaldo Ormazábal (Ex 21 de mayo) de Antofagasta.
A eso de las 10.30 hrs se observaba una fila que se extendía por 3 cuadras. La rápida intervención de la Seremi de Salud, Rossana Díaz Corro, permitió mejorar los flujos del proceso previamente establecidos.
CIRCUITO
En el lugar los profesionales de la salud, quienes debieron exhibir su certificado de la Superintendencia de Salud y su carné de identidad, entraban en un circuito que partía en la galería oeste, sitio en el que se sentaban separados por las demarcaciones que existían en éstas.
Posteriormente el proceso implicaba la inscripción del interesado en el Registro Nacional de Inmunizaciones (RNI), tarea que cumplían 6 digitadores, precediendo a la inoculación misma, la que ejercían otras 6 vacunadores de manera paralela.
ESPERA DE SEGURIDAD
Después de ello, las personas ya vacunadas debían esperar 15 minutos para comprobar que no habían reacciones adversas. Esto, en la gradería este y en el tercio sur de la multicancha.
Al cierre de esta edición el número de profesionales vacunados sólo en este recinto, superaba las 500 personas.
AGRADECIMIENTO
Rossana Díaz Corro, Seremi de Salud, agradeció el trabajo mancomunado del personal de la Universidad de Antofagasta, Universidad Católica del Norte, funcionarios del Ejército, Carabineros y de la PDI, a cargo del Encargado Regional del Programa Nacional del Inmunizaciones (PNI), de la propia Autoridad Sanitaria, Christian Lombardi.
La personera subrayó que el interés de los trabajadores del sector privado de salud rompe el mito de las supuestas dudas respecto de la calidad e idoneidad de la dosis contra el Covid19.