Karla Anavalón, directora editorial de Caligrafix, explica lo que deben evitar los padres al enseñar a leer a los más pequeños de la casa.
La pandemia que nos ha afectado a nivel mundial y que nos ha mantenido en un confinamiento prolongado, ha generado que muchos padres convirtieran sus hogares en salas de clases para continuar con la educación de sus hijos, asumiendo la tarea de apoyar el desarrollo de hábitos para el aprendizaje de la lectura y la escritura.
Para alcanzar este desafío y conseguir buenos lectores desde la infancia, es importante evitar algunos errores que suelen cometer los padres.
Según Karla Anavalón, directora editorial de Caligrafix, “los padres o adultos a cargo son los grandes referentes que tienen los niños y niñas, por lo tanto, si se desea acercarlos a la lectura, es primordial señalar que la actitud que transmitan será su gran aliada. Además de ser ejemplos a seguir, los padres deben otorgarles las instancias de acercamiento a los libros”.
¿Será que estás cometiendo alguno de estos errores? Estos son los más comunes que se cometen al intentar acercar a los niños y niñas a la lectura, según la experta:
● No respetar las etapas de desarrollo de la lectura: cuando los niños comienzan a leer, es normal que lo hagan de manera silábica o que omitan letras en una palabra. La fluidez se logra con el tiempo y la práctica sistemática. Muchas veces los padres fuerzan la lectura para alcanzar prontamente la fluidez, lo que puede desmotivar o frustrar al niño.
● No acercar a los niños a los libros: es muy importante vincularlos desde pequeños con la lectura de libros y cuentos; que los toquen, los vean, los escuchen e interactúen con ellos de diversas formas. Mientras más familiarizados estén con ellos, se dará más natural la adquisición de la lectura y la experiencia de aprendizaje será más motivadora. Una buena estrategia es regalar a los niños libros desde pequeños, así asociarán la lectura a una actividad entretenida e interesante y no solo como puramente académica.
● Elegir las lecturas por ellos: es fundamental darles la opción de elegir lo que quieren leer o ver, independiente de la temática o de la cantidad de texto que tengan. Si bien en muchas oportunidades tendrán que leer libros seleccionados por otros, las lecturas elegidas por ellos siempre serán una instancia de disfrute.
● Imponer la lectura como castigo: los padres a veces creen que sus hijos pasan mucho tiempo frente a las pantallas y para remediarlo imponen momentos de lectura cuando están molestos con ellos, eso hará que los niños relacionen la experiencia como algo negativo.