Por: Franko Arenas, científico
La semana pasada, después de las celebraciones de Fiestas Patrias, diversos medios de comunicación recogieron una video-denuncia ciudadana realizada por turistas a través de redes sociales en la que durante una visita al icónico monumento de nuestra comuna: la “Mano del Desierto”, captaron una sustancia desconocida altamente corrosiva a escasos metros de la escultura.
A partir de pericias realizadas por la BIDEMA y el Centro Científico y Tecnológico de la Región de Antofagasta, CICITEM, se pudo evaluar la gravedad de la situación acontecida que obligó a las autoridades regionales a tomar cartas en el asunto y que alcanzó incluso a los medios de circulación nacional. Además de esto, la semana recién pasada se sumó una nueva denuncia por un incendio en el sector del ex Vertedero La Chimba.
Como si esto fuera poco, hace unos días, a través de las redes sociales, nos enteramos de una emergencia ocurrida en el muelle de la compañía Puerto Mejillones, el cual sufrió un incendio de una correa transportadora de material utilizada para la carga y descarga de materiales desde los barcos que fondean en la bahía.
Estos son sólo algunos de los incidentes ocurridos en nuestra región durante las últimas semanas del mes de la patria. Muchas veces durante estas fechas caemos en el chovinismo nacionalista, pero creo pertinente hacernos la pregunta ¿ser patriota no es también defender nuestro hogar y a quienes lo conforman?
Más allá de bailar cueca y comer empanadas nos toca hacernos cargo de lo que sostiene nuestra existencia en este país y en particular en el Desierto de Atacama, que es la naturaleza, parte clave de la patria que debemos proteger.